viernes, 3 de enero de 2014

La soledad de las formas


CURVAS

La mano que busca se desliza como un caracol frío. Encontrar. No encontrar. Todo lo que deshace. Algo más, contra el tiempo las formas aparecen como huesos alzados de una fosa común. Sin embargo, volvemos a aparecer tan rápidos y hermosos como una nueva era: los dichosos y tristes. Todos rostros sin nombre. Los cuerpos marcan minúsculos caminos como lentros meandros. Alrededor, sin embargo, lo que aparece ha desaparecido.
 
Ana Gorría, La soledad de las formas, Sol y sombra poesía, Santander, 2013.